lunes, 17 de julio de 2017

Buscando inspiración y el regalo que nunca llega

Durante ya varios años vengo pidiendo algún regalito que tenga que ver con la furry fashion Fifi Lapin.
Soy muy dada a que me gusten los personajes kawaii, los animalitos antropomorfos, las cosas kitsch. Pues Fifi tiene un poco de todo. Y, encima, es una coneja enamorada de la moda. Lo tiene todo, ¿o no?
Pero por algún motivo que desconozco las colecciones que sacan para niños, que son una auténtica delicia, que me encantarían para mis nenas, no se venden en España. Y, aunque eso también está bien, hay pocas réplicas por ahí. ¿Nadie les quiere copiar? ¿Tiene Fifi tanto poder que nadie se atreve?

Las Navidades pasadas tuve la suerte de recibir un regalito de Fifi y además auténtico. Quizá porque hay tiendas on-line que nos lo ponen todo muy a mano que uno no tiene excusa... Y fue el libro de la "furry fashionista".

De verdad que me parece una pasada que un pequeño animalito de largas orejas y apenas esbozado con unas líneas pueda tener tanta fuerza y tanto carácter. Y es que pisa la pasarela como las grandes.


Por eso necesitaba alguna prenda suya y hoy, hoy mismo que publico esta entrada, me topo de bruces con una "sample sale" que hacen en su web. Y, precisamente, con la imagen que yo elegí para hacer una prenda única que lucir como ella luce a los grandes diseñadores.


Hace meses que guardé una imagen que encontré en la red, una de tantas que me inspiran y que, antes de conocer Pinterest, guardaba sin ton ni son en mi portátil. Quería hacer algo parecido, pero no era capaz de encontrar un cuadro que me entusiasmase y al mismo tiempo fuese fácil de realizar. Porque sin duda tenía que pintarlo yo.


Así que recurrí a las imágenes que pude encontrar de Fifi Lapin en internet y me dispuse a realizar mi propio chaleco oversize. Están muy de moda y es que, sí, ¡los 90 han vuelto!
Tan fácil como coger un chaleco de segunda mano (por si las moscas: me invade siempre el miedo a personalizar algo que haya comprado para acabar estropeándolo, aunque de momento creo que no ha llegado a ocurrir), mis pinturas para textil Setacolor, un folio con el dibujo para ir recortando los contornos y la plancha, que sólo sube del trastero para estos menesteres. Creo que poco hay que explicar. Es otra de esas actualizaciones sencillas para la ropa que después siempre reciben un ¿dónde lo has comprado? Sí, orgullosa del resultado. Y ya estrenado.

No hay comentarios: